domingo, 4 de diciembre de 2011

EL DÍA QUE NOS MIRÓ UN TUERTO

Ayer, tomando como excusa el siguiente ejercicio de UR1, Monti, S. Bosch y un servidor nos desplazamos a Godella con la intención de recorrer los caminos que sirven de objeto para el mencionado trabajo, y contemplar los paisajes de la huerta.

A las 9 y cuarto de la mañana llegamos a la estación de Godella y sin pensarlo comenzamos nuestro camino hacia la plaza del Castell, extrañándonos por la falta de correspondencia entre el plano y el pueblo. Después de un buen tramo caminando, nos damos cuenta, no solo de que no nos acercamos a dicha plaza, sino que estamos en Burjassot. Enmendado el error, volvemos hacia Godella, donde después de un largo rodeo (cruzando el paseo parcelado sin darnos cuenta), llegamos a la ermita. una vez allí comenzamos nuestro recorrido por el casco urbano para continuar con la huerta, donde no termina nuestra lista de errores, pues por alguna extraña razón, después de seguir correctamente el itinerario marcado (y bajo la lluvia), aparecemos junto al polideportivo de Rocafort, volviendo a Godella siguiendo el curso de la acequia de Moncada. He aquí algunas imágenes de nuestra "accidentada" visita a Godella.
(IMÁGENES PROPIAS)

2 comentarios:

  1. Me ha encantado el título de la entrada y vuestros forzados recorridos por algunos de los lugares de mi infancia. Mis veraneos pasaban en Godella y tengo un maravilloso recuerdo. No sé si podéis decir lo mismo. Lo siento, pero me has hecho sonreír con vuestras idas y venidas.

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    1. Por mis compañeros no puedo hablar, aunque supongo que suscriban mis palabras. Yo al menos me lo pasé genial en esa mañana, pese a todas las complicaciones que surgieron, y me agradó mucho volver a deambular entre huertos, como solía hacer de pequeño (aunque en mi caso solían ser de limoneros).

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